Trucos zapatiles: limpieza de zapatos de piel.

Seguimos con los posts sobre el cuidado de zapatos. Hace varias semanas expliqué la limpieza de zapatos de ante, ahora toca el cuidado de zapatos de piel.

A veces, da la sensación de que los zapatos de piel necesitan menos cuidado que los zapatos de ante pero no es cierto. Es verdad que parecen más duraderos y que se estropean menos, resisten mejor a la lluvia y las manchas se eliminan con más facilidad pero para que duren el mayor tiempo posible en buenas condiciones, es importante cuidarlos y limpiarlos adecuadamente cuando los utilicemos. Si no se hace la piel acaba secándose y agrietándose especialmente en las zonas por las que se arrugan por el uso normal.

He tardado en escribir este post porque necesitaba material para poder ilustrar las imágenes. No voy a entrar en detalles, pero mis botas preferidas la semana pasada sufrieron un pequeño percance y terminaron así (en las fotos no se aprecia bien la gravedad de la situación):

¡¡MANOS A LA OBRA!!

El primer paso es eliminar los restos de barro y la suciedad utilizando un cepillo de cerdas blandas (por ejemplo de pelo de caballo), lo importante es que se elimine el barro y la suciedad con facilidad sin que la piel se ralle.

En caso de que sea díficil eliminar el barro por completo, podemos utilizar un trapo húmedo. Yo suelo utilizar toallitas húmedas que dan un buen resultado y luego se tiran y no hay que preocuparse de limpiarlas. ¡¡Estaban sucias sucias las pobres!!

Una vez que nos hemos asegurado de que la piel está limpia, debemos utilizar una crema acorde al color del zapato para nutrir la piel. Lo normal es disponer de una crema negra, una marrón y otra incolora para el resto de colores. En mi casa parece que la adicción a los zapatos es hereditaria porque he encontrado cremas de un montón de colores. ¡¡Y ojo!! Incoloro (para cualquier zapato) no es lo mismo que blanco (o sport, especial para zapatillas de deporte). Por cierto, un detalle que el azul marino venga bien indicado ya que puede confundirse fácilmente con el negro.

Dependiendo de las marcas, las cremas se presentan en distintos formatos. Puede venir en tarros por lo que para aplicarla, deberemos utilizar un paño o esponja para repartirla por la superficie; otros formatos llevan la esponja incorporada facilitando la tarea. Es bueno disponer de varios aplicadores de la crema para evitar irregularidades en la tonalidad de los zapatos por la mezcla de las cremas secas.

Yo suelo utilizar una crema incolora que compraron mis padres hace lo menos 10 años en la feria de muestras de Gijón. Aunque parezca mentira (porque yo debía tener unos 13 años) recuerdo perfectamente el puesto y al vendedor que dejaba como nuevos unos zapatos llenos de barro en 2 mins. Tiene años ya el bote y como podéis comprobar está apunto de acabarse pero no he podido localizar nada parecido por el momento. Si alguien conociese algo similar me vendría bien la recomendación.

Para dar por finalizado el saneamiento zapatil se necesita cepillos de abrillantado elaborados con pelo de la cola de caballo de cerdas también muy suaves o también puede utilizarse un trapo. Y... ¡¡¡tachán!!!

Estos son los pasos que suelo seguir, aunque el cepillado para quitar el barro suelo saltármelo porque normalmente no hace falta pero sí que es muy importante que los zapatos estén limpios antes de aplicar la crema.
Si limpiamos unos zapatos de cordones, es bueno quitarlos para poder aplicar la crema por todo el zapato.

La crema no debe aplicarse a diario, sólo de vez en cuando.

Cuidado con el cepillo a utilizar porque si las cerdas son duras, podemos rallar la piel.

Si no conseguimos eliminar el barro con el cepillo, debemos utilizar como hemos dicho un trapo húmedo. ¡Ojo! que húmedo no es empapado.

He leído que si se mojan mucho los zapatos a causa de la lluvia, es bueno rellenarlos con papel de periódico para evitar que se deformen.

He encontrado algunos remedios caseros como limpiarlos con limón o con leche pero yo sinceramente no me atrevo.

Y bueno no se me ocurre nada más.... Estoy segura de que muchos de vosotros tenéis vuestros trucos o método personal así que será un placer que lo compartáis con todos. ¡¡Muchas gracias de antemano por vuestra colaboración!!

¡¡Buen lunes!!